Con un sector alimentario cada vez más preocupado por buscar opciones más comprometidas con el medio ambiente para sus embalajes, Pigmea ha aumentado su capacidad de asesoramiento para sus clientes, con el objetivo de ofrecer soluciones biodegradables y compostables adaptadas a las necesidades de cada embalaje.
Dado que las empresas alimentarias cada vez muestran más claramente su preocupación por conseguir embalajes reciclables, biodegradables o compostables, Pigmea ha incrementado su línea de negocio con este tipo de productos. Tras una experiencia de casi dieciocho años trabajando en este campo con materiales ecológicos, Pigmea está asesorando a sus clientes para sustituir estructuras de materiales que no son reciclables por otras que sí lo son, o por materiales biodegradables o compostables en casa del consumidor final. Este último tipo de filmes se destinan, una vez utilizados por el consumidor, al cubo de la materia orgánica. No se trata solo de una cuestión de materiales, sino de un servicio integral que ofrece tintas, colas y procesos que permiten la compostabilidad del material.
Pigmea estudia cada caso para buscar los materiales que mejor se adapten a las necesidades del cliente en cuestiones como la barrera ofrecida por la estructura alternativa, la sellabilidad, el rendimiento en máquina y su resistencia, entre otros parámetros, para encontrar la mejor opción para cada cliente. Además, ofrece información sobre cómo utilizar los materiales y asesoramiento para maniobrar con los mismos en cada tipo de máquina.
En algunos de los mercados exteriores en los que se encuentra presente Pigmea, como Reino Unido, Francia y los países nórdicos, la presión social, de las grandes superficies e incluso legal cada vez es mayor en favor de materiales más respetuosos con el medio ambiente.